Es posible decidir la bondad o maldad de una máxima a partir de un rasgo meramente formal como es su posibilidad de ser universalizada .
Las éticas formales al no depender de las características y deseos de las personas son universales, es decir, válidas para todos y en cualquier circunstancia.
Una acción moral correcta para Kant es cuando se hace uso de esa capacidad para hacer el bien sin importar las consecuencias, lo único que cuenta es la intención.
Libertad
Inmortalidad del alma
La existencia de Dios
Todas las personas deben actuar según sus principios para desenvolverse de manera adecuada en l sociedad.
Se remonta a la Grecia antigua, siendo Platón y Aristóteles sus máximos exponentes. Aristóteles: La felicidad es aquello a lo que todos los humanos aspiran en última instancia. Verdadera felicidad: consiste en el desarrollo pleno (virtuoso, excelente) durante toda una vida, de las funciones que son propias a su naturaleza racional.
Si queremos ser felices, tener una vida bella, admirable, debemos volvernos virtuosos.
La virtud es aquello que nos hace buenos, se adquiere a través del hábito e implica dar en el punto medio tanto en nuestras acciones como en nuestras emociones.
desarrollo Platónico-Aristotélico, propone la existencia de 4 virtudes cardinales: La sabiduría, la justicia, la templanza y el coraje (el cristianismo añadiría a esto las 3 virtudes teológicas: la fe, la esperanza y el amor).
(Atenas, 470 a.C. - id.,
399 a.C) Filósofo griego. Pese a que no dejó ninguna obra escrita y son escasas
las ideas que pueden atribuírsele con seguridad, Sócrates es una figura capital
del pensamiento antiguo, hasta el punto de ser llamados presocráticos los
filósofos anteriores a él. Rompiendo con las orientaciones predominantes
anteriores, su reflexión se centró en el ser humano, particularmente en la
ética, y sus ideas pasaron a los dos grandes pilares sobre los que se asienta
la historia de la filosofía occidental: Platón, que fue discípulo directo suyo,
y Aristóteles,
que lo fue a su vez de Platón.
Ética
de Sócrates
Sócrates llamó “virtud” aquello que era común para
toda la raza humana y en todas las circunstancias, por ejemplo, la justicia, la
valentía o el autocontrol. De esta manera no sólo se opuso al relativismo de
los sofistas, sino que extrajo de todas las virtudes aquellas que hoy
llamaríamos “virtudes morales”. Por esa razón a Sócrates se le considera como
el fundador de la ética.
(Atenas, 427 - 347 a. C.) Filósofo griego.
Junto con su maestro Sócrates y su discípulo Aristóteles, Platón es la figura
central de los tres grandes pensadores en que se asienta toda la tradición
filosófica europea.
Nacido en el seno de una familia
aristocrática, Platón abandonó su inicial vocación política y sus aficiones
literarias por la filosofía, atraído por Sócrates: fue su discípulo desde los
veinte años y se enfrentó abiertamente a los sofistas (Protágoras, Gorgias). Tras la condena a muerte de Sócrates (399 a. C.), huyó de Atenas y se apartó
completamente de la vida pública; no obstante, los temas políticos ocuparon
siempre un lugar central en su pensamiento, y llegó a concebir un modelo ideal
de Estado.
Viajó por Oriente y el sur de Italia, donde
entró en contacto con los discípulos de Pitágoras; tras una negativa experiencia en Siracusa como
asesor en la corte del rey Dionisio I el Viejo, pasó algún tiempo prisionero de
unos piratas, hasta que fue rescatado y pudo regresar a Atenas. Allí fundó en
el año 387 una escuela de filosofía, situada en las afueras de la ciudad. La
Academia de Platón, una especie de secta de sabios organizada con sus
reglamentos, contaba con una residencia de estudiantes, biblioteca, aulas y
seminarios especializados, y fue el precedente y modelo de las modernas
instituciones universitarias.
Nació en Estagira (actual
Stavros), Macedonia, en el año I de la Olimpiada XCIX, hacia el año 386/385 o
384 a.C.
Hijo de Nicómaco, médico personal del rey de Macedonia Amintas III. A
la muerte de su padre y de su madre, Festis, y después de su único hermano Arimnesto,
se trasladó a la ciudad de Atarneo. Allí tuvo como tutor a Próxeno.
Viajó a Atenas con 17 años con intención de asistir a la Academia de Platón.
Aristóteles fue discípulo suyo y de otros pensadores como Eudoxo durante
los veinte años que estuvo en la Academia, donde se le apodó "el
inteligente"
Ética
Aristóteles expone sus
reflexiones éticas en la "Ética a Nicómaco", fundamentalmente. Sus
otras dos obras sobre el tema son la "Ética a Eudemo", que recoge
elementos de la reflexión aristotélica de su período de juventud y, por lo
tanto, anteriores a la teoría de la sustancia, por lo que contienen algunos
vestigios de platonismo; y la "Gran Moral", en la que se resumen las
ideas fundamentales de la "Ética a Nicómaco", por lo que lo que
coincide con el Aristóteles de la madurez; ninguna de ellas aporta, pues, algo
distinto a lo expuesto en la "Ética a Nicómaco" (en la "Ética a
Eudemo", por ejemplo, se repiten textualmente cuatro de los libros de la
"nicomáquea").
En el mundo de hoy hay
mucha confusión traída a nuestras vidas por una filosofía de la vida llamada
«Materialismo». El Materialismo nos enseña que si tenemos más seremos más
felices. Es el «Tengo, luego existo», que reemplaza la famosa frase de
Descartes [Pienso, luego existo]. Esa es la filosofía que nos venden los
medios de comunicación y las grandes campañas publicitarias. Eso se nos ha
metido en la iglesia latinoamericana de una forma alarmante y los pastores
estamos mirando con consternación cómo nos ha cambiado los valores y el énfasis
en la vida de nuestras ovejitas.
Sin embargo, cuando la Biblia habla de prosperidad y bendición de Dios, lo hace
en una manera «integral»: eso significa, que habla de prosperidad material,
física, ministerial, espiritual, matrimonial, familiar, etc. Pasajes como
Salmos 1:3 lo dicen claramente: «…todo lo que hace prosperará» -no
solamente el aspecto material.
Por eso, digo que la prosperidad integral es como un buen pastel de
manzanas: por supuesto que no podemos tener un pastel de manzanas sin
manzanas -pero las manzanas no hacen todo el pastel. Sin embargo, después de
más de un millón y medio de kilómetros recorridos por Latinoamérica estoy
viendo que mucha gente ha puesto demasiado énfasis en las manzanas y se ha quedado
sin pastel: sin matrimonios, sin familia, sin vida espiritual, sin ministerio.